ALFREDO SALAZAR DE SANTIAGO

En la era contemporánea, la interconexión entre la salud humana, animal y ambiental se ha vuelto más evidente que nunca. Dos conceptos clave han emergido para abordar esta compleja relación: la Salud Planetaria y ONE HEALTH. Ambos enfoques buscan garantizar un futuro sostenible y saludable para todos los habitantes del planeta, pero ¿cuál es la diferencia entre ellos y cómo se complementan?

La Salud Planetaria se refiere al bienestar integral de los ecosistemas y su impacto en la salud humana. Reconoce que la salud de las personas está intrínsecamente ligada a la salud de nuestro planeta. Factores como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación tienen repercusiones directas en nuestra salud, desde enfermedades respiratorias hasta crisis alimentarias. 

Este enfoque promueve la idea de que cuidar nuestro planeta es cuidar nuestra propia salud. Se trata de adoptar prácticas sostenibles, reducir nuestra huella ecológica y promover la conservación de la biodiversidad. Al proteger los ecosistemas, estamos protegiendo nuestra salud y la de las generaciones futuras. 

Por otro lado, el enfoque ONE HEALTH va más allá de la salud humana y ambiental para incluir también la salud animal. Reconoce la estrecha relación entre la salud de los seres humanos, los animales y el medio ambiente, y aboga por un enfoque integrado para abordar los desafíos de salud que enfrentamos. La idea central de ONE HEALTH es que las enfermedades no conocen fronteras y pueden transmitirse entre humanos, animales y el medio ambiente. 

Por lo tanto, es crucial adoptar estrategias de prevención y control que consideren a todos los actores involucrados. Esto incluye la vigilancia de enfermedades zoonóticas (transmisibles entre animales y humanos), la promoción de la salud animal y la conservación de los ecosistemas. Aunque la Salud Planetaria y ONE HEALTH tienen enfoques ligeramente diferentes, comparten el objetivo común de promover un equilibrio saludable entre las personas, los animales y el medio ambiente. 

De hecho, estos enfoques se complementan y se benefician mutuamente. Por ejemplo, al adoptar prácticas sostenibles se protege el medio ambiente y se cuida la salud animal al conservar hábitats y reducir la contaminación, así mismo, mejorando la salud animal se previenen enfermedades zoonóticas, protegiendo así la salud humana y promoviendo la conservación de la biodiversidad. 

A pesar de los beneficios de los enfoques integrados, hay desafíos como la falta de conciencia pública, resistencia al cambio y falta de cooperación internacional. No obstante, la tecnología, investigación y colaboración interdisciplinaria ofrecen oportunidades para abordar los problemas de salud de manera integral. 

Con base en lo anterior, se observa que la Salud Planetaria y ONE HEALTH representan visiones complementarias para enfrentar los desafíos de salud y medio ambiente en el siglo XXI. Mientras que la Salud Planetaria pone el énfasis en la interconexión entre la salud humana y ambiental, ONE HEALTH amplía este enfoque para incluir también la salud animal.

Al integrar estos dos enfoques y trabajar juntos a nivel local, nacional e internacional, se podrá construir un futuro más saludable y sostenible para todos. Al tiempo.