
La medicina Folk en México: tradición, cultura y salud
ALFREDO SALAZAR DE SANTIAGO
La medicina folk en México, conocida como medicina tradicional, es un sistema de prácticas y conocimientos transmitidos de generación en generación y profundamente arraigados en las culturas indígenas y mestizas del país. Se basa en el uso de plantas medicinales, rituales, y el conocimiento ancestral para prevenir y tratar enfermedades, representando una rica amalgama de creencias prehispánicas, influencias coloniales y adaptaciones modernas, ofreciendo una alternativa o complemento a la medicina convencional.
La medicina tradicional mexicana tiene sus raíces en las civilizaciones precolombinas, como los aztecas y mayas, quienes desarrollaron avanzados conocimientos en herbolaria y técnicas curativas. Con la llegada de los españoles, se produjo una fusión de saberes, integrando prácticas europeas y africanas que enriquecieron aún más este corpus médico.
El papel de los curanderos, también conocidos como «hueseros» o «yerberos», es fundamental en la medicina folk, quienes actúan como intermediarios entre el mundo natural y espiritual, utilizando una combinación de conocimientos herbolarios, rituales y técnicas manuales para sanar a sus pacientes. La curandería no sólo aborda aspectos físicos, sino también emocionales y espirituales, proporcionando una visión integral de la salud.
Uno de los pilares de la medicina folk en México es la herbolaria. México alberga una vasta biodiversidad, lo que ha permitido el desarrollo de una amplia gama de remedios basados en plantas. Entre las plantas más utilizadas se encuentran la sábila (aloe vera) para tratar quemaduras y heridas, la manzanilla para problemas digestivos y nerviosos y el epazote para trastornos gastrointestinales, entre otras muchas.
Además de las plantas, los rituales y prácticas espirituales son componentes esenciales. Por ejemplo, las limpias, que consisten en el uso de hierbas, huevos o velas para eliminar las malas energías y restaurar el equilibrio espiritual del individuo. Los temazcales, baños de vapor tradicionales, también son populares y se utilizan para desintoxicar el cuerpo, aliviar dolencias físicas y promover la salud mental.
A pesar de su profunda tradición y efectividad en muchos casos, la medicina folk ha enfrentado desafíos. Durante mucho tiempo, fue vista con escepticismo y relegada a un segundo plano frente a la medicina alopática. Sin embargo, en las últimas décadas, ha habido un resurgimiento del interés por las prácticas tradicionales, tanto por parte de la comunidad científica como de la población en general.
La medicina folk no sólo es un testimonio del rico patrimonio cultural de México, sino que también desempeña un papel crucial en la salud de muchas comunidades rurales y urbanas. En zonas donde el acceso a servicios médicos es limitado, los curanderos y sus prácticas son una fuente vital de atención sanitaria.
Por lo tanto, el futuro de la medicina folk parece prometedor. Con el creciente reconocimiento de la importancia de las medicinas tradicionales y el apoyo institucional, es probable que estas prácticas evolucionen y se adapten a los tiempos modernos. La clave será encontrar un equilibrio entre la preservación de los conocimientos ancestrales y su integración con los avances de la medicina contemporánea, asegurando que las generaciones futuras puedan beneficiarse de esta rica tradición. Al tiempo.