Las Morismas de Bracho, revoltijo de paganismo, cristianismo e historia
Parte 1
LUCÍA DINORAH BAÑUELOS
FOTOS: FELIPE ESCOBAR GALICIA
ZACATECAS, ZAC.- Tan colorida como desconocida, tan estruendosa como misteriosa y tan llena de mitos y audiencia como de participantes activos, así es la Morisma de Bracho, una mezcla entre paganismo, cristianismo y un poco de mito e historia. Todo en un revoltijo que se ha convertido en una tradición muy zacatecana.
Su fama va más allá de los límites estatales. No sólo se habla de la morisma en otros estados de la República Mexicana, sino que también ha sido tema de estudio en universidades, de autores nacionales y extranjeros, y de programas televisivos en otros países, incluso del prestigioso National Geographic.

Por la cantidad de participantes y la escenificación de las batallas, la Morisma de Bracho es única en el mundo, pues ni en la mismísima España —país que participó en la épica Batalla de Lepanto— se hace una representación de tal magnitud, por lo que se ha a ese país y a Brasil, por ejemplo, al igual que a otros estados como Puebla y Tlaxcala.
Por la majestuosidad de su colorido y arraigada tradición cultural, las morismas fueron declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado de Zacatecas en 2014.
Este año vuelve el colorido jolgorio, salpicado de religiosidad popular al lomerío de Bracho, luego de dos años que la escenificación fue suspendida por la pandemia de Covid-19.
Las Morismas de Bracho sólo se han suspendido en cinco ocasiones: en 1862 durante la Intervención Francesa, en 1914 durante la Toma de Zacatecas, en 1934 por un conflicto entre el Estado y el clero, y en 2020 y 2021 con la contingencia sanitaria.
Desconocimiento generalizado
Aunque en ocasiones, hasta cinco generaciones de una misma familia han participado en las batallas de Bracho —como herencia de fe y tradición—, actualmente casi nadie sabe qué es lo que se representa, su significado ni de dónde vienen.
La devoción quedó atrás, aunque la finalidad de la morisma es venerar a San Juan Bautista, razón por la que en la festividad se celebran misas, hay primeras comuniones, confirmaciones y peregrinaciones.

En un pequeño sondeo, las respuestas fueron tan variadas como —en ocasiones— disparatadas, tanto “morismeros” como público en general contestaron a la pregunta: ¿Qué se celebra y que se representa en la morisma?
De 20 consultados, 14 dijeron que era una representación de las Cruzadas, dos atinadamente dijeron que la Batalla de Lepanto, pero desconocían dónde se libró y que fue una batalla naval.
Nadie supo desde cuándo se llevan a cabo y lo más sorprendente fue la respuesta de un “cristiano” que dijo que en la capilla de Bracho se venera a San Judas Tadeo, respuesta que contrasta con la respuesta de la mayoría, que supo que la fiesta es en honor a San Juan Bautista.
Hubo también quien se sinceró y dijo que no sabía, pero que le gustaba formar parte de un batallón, convivir con los amigos, que le emocionaba el momento de las batallas, “tronar” las escopetas y cañones, y la fiesta que había en torno a la celebración con carnes asadas, otros platillos y cerveza.
Un mar de gente
Entre espectadores, devotos y morismeros hay estimaciones de que en los tres días de la morisma, tras el Coloquio del jueves, al menos hay 35 mil almas que participan de algún modo.
Autoridades municipales y estatales calculan que son unas 16 mil personas uniformadas las que se mezclan entre peregrinos, devotos locales y comerciantes.
Mantener y garantizar la seguridad en Lomas de Bracho es una tarea casi titánica en esos días, pues desde el inicio de los ensayos hay que cuidar la integridad de al menos 4 mil morismeros cada fin de semana desde el primer domingo de mayo; conforme se acerca la fecha de la morisma, la cantidad de personas aumenta, pues el lomerío se habita un fin de semana, en campamentos, casas improvisadas o construidas ex profeso.

Por ello se deben coordinar todas las fuerzas del orden y de protección civil estatales y municipales, para atender a un mar de gente.
Este año, para garantizar que la morisma transcurra en un ambiente seguro en todos los sentidos, autoridades municipales y estatales desplegarán un operativo en el que se coordinarán las policías estatal y municipal, la Guardia Nacional e incluso el Ejército, según informó Jeu Márquez, coordinador de Protección Civil (PC) y Bomberos del Estado.
El despliegue de elementos y vehículos se dispuso desde que iniciaron oficialmente los ensayos, y desde entonces cada fin de semana se monta vigilancia.
En cuanto a la prevención de accidentes —viales, por la detonación de pólvora, en puestos de comida por el manejo de gas o para su atención inmediata, etcétera—, trabajarán en conjunto PC estatal y las cuadrillas de Protección Civil de la Cofradía San Juan Bautista, la Cruz Roja y la Red de Emergencias Médicas de Zacatecas (Remeza), y unidades de PC de la capital y algunos municipios vecinos junto con la Policía Vial.
Se estima que entre todas las corporaciones de seguridad y PC que cubrirán el área y perímetro de Lomas de Bracho este año, sumarán arriba de 100 elementos, con ambulancias, vehículos de bomberos y patrullas.
Todos los elementos de PC, ya sean del estado o municipales, supervisan los puestos de comida y juegos mecánicos para evitar accidentes.
Antonio Hernández Villamil, coordinador de PC capital, dijo que durante los ensayos se ha dispuesto una ambulancia y una unidad de ataque (camión de bomberos) con tres elementos cada una.

